LINEAS DE TRABAJO
DESDE EL ECUMENISMO CONSTRUIMOS UNA PAZ CON JUSTICIA PARA COLOMBIA
DIPAZ trabaja en tres lineas
VERDAD Y JUSTICIA
Entendemos el derecho a la verdad a la luz del evangelio como la posibilidad del conocimiento profundo y certero de nuestras realidades, testimoniamos esas verdades desde nuestras realidades sin que ellas sean una misma, sino que se encuentran en la posibilidad de que el reino de Dios sea presente y verbo en nuestras vidas con dignidad. En ese reconocimiento también radica la justicia que en sí misma es fruto de la verdad.
“Bienaventurados los que tienen hambre y sed de justicia porque ellos serán saciados” Mateo 5, 6
ANTIMILITARISMO Y ACCIÓN NOVIOLENTA
Desde nuestra identidad de fe asumimos el principio y la ética evangélica de la paz que es fruto de la justicia, el respeto a la dignidad humana, la valoración de la diversidad que Dios ha creado, la no violencia y la esperanza de una vida abundante para toda la creación.
«Así pues, hagan ustedes con los demás como que los demás hagan con ustedes; porque en eso se resumen la ley y los profetas» Mt 7, 12
RECONCILIACIÓN
En nuestra misión y testimonio entendemos la reconciliación como un acto de reconocimiento mutuo, en el que nos sabemos juntos y juntas pueblo de Dios. Ese reconocimiento es el que permite que nuestras diferencias se conviertan en alimento de vida, entendida como la plenitud mutua, el perdón mutuo y la construcción del Reino de Dios para todas y todos
«Cristo es nuestra paz: el hizo de judíos y no judíos un solo pueblo, destruyó el muro que los separaba y anuló en su propio cuerpo la enemistad que existía» Ef 2, 14
Mensajes que guían nuestro trabajo
Creemos que la verdad completa que sale a la luz, libera a víctimas y victimarios y posibilita la paz con justicia y la reconciliación.
Rechazamos la militarización de la sociedad, llamamos a la acción noviolenta y trabajamos por una cultura de paz para evitar la reproducción de nuevos ciclos de violencia.
Somos testigos que algunas comunidades ofrecen penas distintas, alternativas que restauren al perpetrador y posibilitan el perdón, en el marco de Justicia Restaurativa y Comunitaria.
Señalamos que territorios reconciliados pasan por una tierra bien distribuida que garantiza trabajo, salud, vivienda, derechos para la vida humana y de todo lo creado por Dios.
Iglesias locales y organizaciones eclesiales nos disponemos a contribuir como espacios de capacitación, acogida y acompañamiento en procesos de construcción de paz y reconciliación.
Iglesias y organizaciones eclesiales nos ofrecemos como puentes para facilitar diálogos difíciles e improbables con contradictores.