DiPaz junto con Cedecol y sus organizaciones aliadas preparan reflexiones y análisis para el CNP, mediante un diálogo con Omar Fernández delegado de la Oficina del Alto Comisionado de Paz y con la pastora Adelaida Jiménez integrante de la mesa de negociación del gobierno nacional con el ELN.
El Encuentro Regional de Comunidades de Fe en el Proceso de Paz, se desarrolló en el marco de la construcción metodológica de la participación de la sociedad civil en el proceso de negociaciones con el ELN, que hace el Comité Nacional de Participación. Con el objetivo de revisar los avances en la implementación de la Paz Total y las propuestas de las iglesias para la construcción de paz.
Contó con la participación de Omar Fernández delegado de la Oficina del Alto Comisionado de Paz y Adelaida Jiménez, pastora Presbiteriana, teóloga, educadora e integrante de la mesa de negociación del gobierno nacional con el ELN.
Durante la reunión, Fernández resaltó el proyecto actual del gobierno de Gustavo Petro y Francia Márquez en la implementación de la política de la Paz Total, la cual «identifica la superación de inequidades mediante las reformas planteadas desde el legislativo».
Así como también, la necesidad de superar la problemática relacionada con un nuevo planteamiento para la política antidrogas, que priorice en medio de sus grandes dificultades «la no persecución a pequeños cultivadores, sino a las grandes estructuras organizadas”.
Además, Fernández aseguró que se está trabajando por lograr una reforma justa a las fuerzas militares y de policía, que limiten el uso de la fuerza como un último recurso y se proteja la seguridad e integridad de los ciudadanos y las ciudadanas.
Por tal razón, reconoce la importancia que exista un gabinete de paz, donde los jefes de cada ministerio, sean responsables desde sus funciones en la promoción de la paz, mediante un cambio de visión. Cabe resaltar, que según Fernández, está labor se diferencia de la tarea realizada por la OACP, enfocada principalmente en las negociaciones con los grupos armados.
Sobre este último punto, aseguró lo que la OACP lleva a cabo más de 10 procesos de negociación de paz, donde en un primer momento, que se define como la fase de exploración de voluntades para entrar en el proceso de paz; un segundo momento se define como el dialógico, en el que constituye una mesa formal de conversaciones ya sean con un carácter político (es decir desde las problemáticas estructurales del conflicto) o sociojurídico (que involucra la ley de sometimiento o sujeción a la justicia a actores armados). Y otro momento, es la implementación de los acuerdos.
Por otra parte, Adelaida Jiménez, pastora presbiteriana, teóloga, educadora e integrante de la delegación del Gobierno Nacional de negociación con el ELN, durante su intervención resaltó que en el proceso de paz se desarrolló el punto uno de la participación, con el fin de lograr un acuerdo sociopolítico o el gran acuerdo nacional. De manera que se reconozcan, aspectos clave para la promoción del acuerdo, como la apertura del cese al fuego para frenar los enfrentamientos en armas, entendida entre sus dificultades.
Además, la pastora destacó que en este acuerdo se incluyó el enfoque ambiental, para reconocer a la naturaleza como víctima de los impactos socioambientales producidos a causa del conflicto. Como también, el abordaje del tema y la participación de las víctimas en el siguiente ciclo de negociaciones.
Por último, se desarrolló un trabajo grupal para dialogar sobre las experiencias de construcción de paz y reconciliación, desde las diferentes organizaciones e iglesias. La actividad buscó identificar criterios y distintas metodologías para la construcción de paz.
En ese contexto, Milton Mejía coordinador nacional de DiPaz, concluyó sobre la importancia de citar a las iglesias, desde sus visiones y espiritualidades, para hacer una veeduría social que realice alertas tempranas, ante posibles amenazas en los territorios. Lo cual permitirá fortalecer el mecanismo de monitoreo en las negociaciones de paz.
Por: Danna Robayo, comunicadora social para la paz